ARS LONGA,VITA RAJIS II

Es una de esas extrañas ocasiones en las que parece que uno de mis planes va a salir bien,¿verdad?

Pero bien,este post no es tanto para congratularme como para explicar los fallos más o menos consentidos que le he visto a la por otro lado graciosa iniciativa de los regalos.

El caso es que la obligación es la de prometer tres regalos a los que comenten el post que está exprofeso para ello,pero...¿Y si no tienes ni tres lectores?

Sigamos por ahí,no tenemos tres lectores,así que decidimos aprovecharnos de la coyuntura y empezar a pedir regalos a diestra y siniestra,hasta que se nos borren las letras del teclado de tanto machacar pidiendo obsequios.

Tal vez,y a partir de aquí sale el que para mí es el gran fallo,entonces una de las personas a quienes hayamos pedido decide devolvernos la pelota,aprovechando esa regla que parece haberse aceptado tácitamente pero que si os fijais no aparece realmente por ningún lado,la de aumentar pues el número de ofrecimientos.El absurdo de esta medida se observa mejor a gran escala,como tantas y tantas cosas.

Pongamos que mi mayor número de lectores haya sido seis (que por ahí habrá andado la cosa,vayan a creerse ustedes XD),pues entonces Farru,como de vez en cuando parece ser un poquito más espabilado de lo que aparenta,pues decide pedir siete regalos.Hum,sí,de acuerdo,tengo que ofertar pues ventiuno,pero realmente me van a pedir seis,salgo ganando uno.Aumenten las cifras exponencialmente y verán en toda su magnitud el tremendísimo fallo que ello conlleva.

Por todo ello,y como iniciativa totalmente personal,yo voy a utilizar una escala que considero más justa en todos los aspectos,un 1:1 :).Con esto quiero decir que sí,voy a pedirle cositas a mis allegados,pero siempre a cambio de yo de motu propio darles algo a cambio.

No sé,a mí me parece más justo,y que tiene esa belleza de las cosas bien pensadas ;).Por tanto,prima,te debo un algo,pensándolo desde ya estoy :)